
El estado en que se encuentren las puertas del interior del hogar dicen mucho de las costumbres de los que residen en la vivienda, por ende la persona nunca debe descuidarse con la apariencia de estas estructuras. En ocasiones las puertas por el uso y los años tienden a deteriorarse, perder el color, y hasta astillarse, por ello se debe dar ciertos mantenimientos cada cierto tiempo para garantizar su durabilidad y su buena apariencia por años. Si la puerta ya presenta algunas irregularidades estructurales como algunas astillas, o si ya no posee color, lo recomendable es retirarla y aplicarle un poco de albañilería.
Remodelar una puerta es bien fácil y rápido, donde lo único que se debe hacer es retirar la puerta y lijarla completamente hasta quitar cualquier imperfección y toda la capa de barniz que tenga, posteriormente se limpia velando que no quede ningún residuo del lijado, y luego se procede a pintar con una pintura natural o blanca, la elección del color de pintura dependerá de los gustos de la persona. Una vez la pintura esté completamente seca se debe aplicar una o dos capas de barniz, lo cual garantizará la durabilidad y resistencia de la madera, así mismo se evitará que aparezcan hongos en ella.
Si la persona no tiene mucha experiencia en bricolaje, existen miles de páginas en Internet que explican paso a paso como remodelar una puerta, también puede optar por contratar a un experto en el área, o simplemente puede optar por cambiar la puerta por una nueva, esto reducirá al máximo el tiempo, pero aumentará el coste de la inversión.
Créditos & citaciones en formato APA: Revista decorativa JOP.es, equipo de redacción profesional. (2013, 10). Puertas de interior. JOP. Obtenido en fecha , desde el sitio web: https://www.jop.es/42119271-puertas-de-interior.html.