
Al momento de diseñar y construir nuestra cocina, se debe contar con personal experto que ayuden en el montaje de esta. Quienes facilitan la tarea de instalar cada uno de los muebles que van en dicho lugar, los cuales muchas veces se transforman en una tarea difícil si no se cuenta con el conocimiento ni las herramientas adecuadas.
Pero si cuentan con lo antes descrito y creen poder hacerlo, deben comenzar primero, con el montaje de los módulos inferiores, para luego seguir con los superiores. Se deja para el final el montaje de la encimera, se define la estructura a realizar y la distribución de los muebles, para continuar con los orificios y posterior instalación de los muebles.
Los métodos de montaje de los muebles y accesorios de cocina son un verdadero dolor de cabeza que sería inútil intentar resolver aquí. La inventiva de los fabricantes en esta materia es ilimitada y parecen competir entre sí en imaginación para complicar nuestras vidas. Por lo tanto, nos limitaremos a unos pocos datos sencillos, que le permitirán, en particular, desmontar y volver a montar un mueble cuando sea necesario trabajar en un dispositivo.
BISAGRAS Y PIVOTES
Las bisagras utilizadas para las puertas de los muebles de cocina suelen ser del tipo «invisible». Se componen de tres elementos:
un herraje de caja (a menudo de plástico…) que permite la instalación en el panel de los muebles;
un accesorio frontal atornillado en la puerta;
uno o dos tornillos de ajuste para ajustar la puerta en relación con el armario u otra puerta que pueda estar colgada de él.
A ello hay que añadir los pivotes (altos y bajos) que sustituyen a las bisagras, que equipan a algunos muebles, pero que a la larga resultan muy frágiles debido a la propia naturaleza de los paneles (aglomerado) en los que tienen una gran dificultad de sujeción.
La mayoría de las puertas de los armarios se montan con este tipo de bisagra de extensión. Sólo una parte de ella cabe en una carcasa redonda que ha sido perforada en el panel del mueble. El otro se coloca en la puerta, donde debe ser insertado en una placa fijada en la propia puerta. Un sistema compuesto por dos tornillos permite, por un lado, ajustar el nivel de la puerta y, por otro, ajustar el cierre. Como ambos son interdependientes, es necesario actuar uno sobre el otro para lograr el ajuste óptimo.
MONTAJE Y SUSPENSIÓN DE MUEBLES
Todos estos accesorios tienen en común que se encuentran en dos o incluso tres partes:
un accesorio para cada una de las partes del mueble a ensamblar;
un tornillo de conexión.
Algunas de estas piezas de conexión están diseñadas para permitir un montaje y desmontaje sucesivos, mientras que otras no.
En ambos casos, es necesario ser muy cuidadoso en las intervenciones, especialmente debido a la fragilidad del material base -por lo general tableros de partículas- que no tolera muchas operaciones de atornillado y desatornillado.
El nivel de intervención depende de la edad y la naturaleza del dispositivo.
FACHADAS DE APARATOS Frentes de electrodomésticos
Muchos frentes de electrodomésticos (en este caso un frigorífico) integrados en una cocina totalmente equipada se enganchan simplemente en la puerta original.
ACCESORIOS DE MONTAJE
Estos bloques, llamados accesorios, (aunque sean de plástico como aquí) están formados por dos elementos (macho-hembra) unidos por un tornillo de un cuarto de vuelta. Están diseñados para el montaje y desmontaje sucesivos.
Créditos & citaciones en formato APA: Revista decorativa JOP.es, equipo de redacción profesional. (2018, 11). Montaje de cocinas. JOP. Obtenido en fecha , desde el sitio web: https://www.jop.es/42121182-montaje-de-cocinas.html.